Honoring Our Beloved Member Helen Holguin
News| February 4, 2025
Celebrating the Life and Legacy of Helen Holguin: A Champion of Workers’ Rights
Helen Holguin, a dedicated advocate for workers’ rights and a beloved member of the UFCW Local 770 family, passed away peacefully at the age of 86. Throughout her life, Helen was a devoted mother, grandmother, and great-grandmother, as well as a tireless champion for labor rights. Her decades of service to our union and her unwavering commitment to justice left a lasting impact on our union members, our community and the countless lives she touched.
Helen’s journey with UFCW Local 770 began in 1989, following the merger of the Butchers Union Local 563, where her father, JJ Rodriguez, served as president. Her deep connection to the labor movement was further strengthened by her father’s friendship with then-UFCW 770 President Rick Icaza, whom she remembered as a “great man, very kind-hearted.”
Over the course of her career, Helen held various roles within UFCW 770, each marked by her tireless dedication to serving union members. She began as an office worker, later becoming a union representative, and eventually transitioning to the organizing and membership departments.
Throughout her time with our union, Helen took immense pride in helping members file grievances, educating them about the importance of union membership, and empowering them to fight for their rights. “It’s a good feeling to be able to help members,” she used to say.
Helen’s passion for justice and solidarity was deeply rooted in her upbringing. As a child, she was inspired by her father’s leadership in the Butchers Union. As a teenager, she stood alongside him and her siblings on picket lines, visited union members in their homes, and distributed fliers at packing houses and rendering plants in the City of Vernon. These formative experiences instilled in her a profound understanding of the power of worker solidarity.
Her dedication to the labor movement was further shaped by her encounters with legendary figures such as César Chavez and Dolores Huerta. Helen fondly recalled how her mother would prepare vegetarian enchiladas for César during his visits to strategize with her father. These interactions with labor icons fueled her lifelong passion for organizing and advocacy.
Helen’s commitment to union values was a family tradition. Her late husband, Ralph Holguin, was a member of the Glaziers’ Union, her brother JJ Rodriguez Jr. served as a Union Rep for UFCW 770, and two of her three children, Al Holguin and Janice Montaño, are also union members. Her legacy of service and solidarity lives on through her family and the countless lives she touched.
Helen’s dedication and love for UFCW 770 members was unwavering. She devoted her life to serving and advocating for workers’ rights, which brought her immense joy and fulfillment. The love for her family– her children Al Holguin, Janice Montaño and Elaine Thayer, as well as her 12 grandchildren and great-grandchildren– matched her dedication and was a constant source of pride and happiness.
Her UFCW 770 union family extends its deepest gratitude for her decades of unwavering service and dedication. Helen’s legacy of compassion, advocacy, and solidarity will continue to inspire generations to come.
Helen Holguin will be deeply missed, but her spirit and contributions to the labor movement will never be forgotten. Rest in power, Helen. Your fight for justice and your love for your union family will forever remain in our hearts.
Celebrando la Vida y el Legado de NUESTRA QUERIDA Helen Holguin
Helen Holguin, una gran defensora de los derechos de los trabajadores y querida miembro de la familia de UFCW Local 770, falleció pacíficamente a la edad de 86 años. A lo largo de su vida, Helen fue una madre, abuela y bisabuela devota, así como una defensora incansable de los derechos laborales.
Sus décadas de servicio en nuestra unión y su compromiso inquebrantable con la justicia dejaron un impacto duradero en los miembros de nuestro sindicato, nuestra comunidad y las innumerables vidas en las que dejó una huella.
El recorrido de Helen con UFCW Local 770 comenzó en 1989, después de la fusión del Sindicato de Carniceros Local 563, donde su padre, JJ Rodríguez, se desempeñó como presidente. Su profunda conexión con el movimiento laboral se fortaleció aún más por la amistad de su padre con el entonces presidente de UFCW 770, Rick Icaza, a quien Helen recordaba como un "gran hombre, de muy buen corazón".
A lo largo de su carrera, Helen desempeñó varios roles dentro de UFCW 770, cada uno marcado por su incansable dedicación al servicio de los miembros del sindicato. Comenzó como personal de oficina, luego se convirtió en representante de la unión y, finalmente, pasó a los departamentos de organización y membresía.
Durante el tiempo que estuvo en nuestro sindicato, Helen se sentía muy orgullosa de poder ayudar a los miembros a presentar quejas, educándolos sobre la importancia de hacerse miembro de la unión y enseñarles cómo podían ellos mismos empoderarse para luchar por sus derechos. "Se siente muy bien poder ayudar a los miembros", solía decir Helen.
La pasión de Helen por la justicia y la solidaridad estaba profundamente arraigada en su educación. De niña, se inspiró en el liderazgo de su padre en el sindicato de carniceros. De adolescente, estuvo junto a él y sus hermanos en los piquetes, visitó a los miembros de unión en sus hogares y distribuyó volantes en las plantas empacadoras y plantas de procesamiento de alimentos en la ciudad de Vernon.
Estas experiencias formativas le inculcaron una profunda comprensión del poder de la solidaridad de los trabajadores. Su dedicación al movimiento laboral se vio aún más moldeada por sus encuentros con figuras legendarias como César Chávez y Dolores Huerta. Helen recordaba con cariño cómo su madre preparaba enchiladas vegetarianas para César Chávez durante sus visitas para elaborar estrategias con su padre. Estas interacciones con íconos laborales alimentaron su pasión de toda la vida por la organización y la defensa de los derechos de los trabajadores.
El compromiso de Helen con los valores sindicales era una tradición familiar. Su difunto esposo, Ralph Holguin, era miembro del Sindicato de Vidrieros, su hermano JJ Rodríguez Jr. se desempeñó como representante sindical de UFCW 770 y dos de sus tres hijos, Al Holguin y Janice Montaño, también son miembros de uniones. Su legado de servicio y solidaridad sigue vivo a través de su familia y las innumerables vidas en las que dejó una huella.
La dedicación y el amor de Helen por los miembros de UFCW 770 fueron inquebrantables. Dedicó su vida a servir y defender los derechos de los trabajadores, lo que le daba una inmensa alegría y satisfacción. El amor por su familia –sus hijos Al Holguin, Janice Montaño y Elaine Thayer, así como sus 12 nietos y bisnietos– fue equiparable al amor a la unión, lo cuál la llenaba de orgullo y felicidad.
Su familia de la unión del UFCW 770 extiende su más profundo agradecimiento por sus décadas de inquebrantable servicio y dedicación. El legado de compasión, defensa y solidaridad de Helen seguirá inspirando a las generaciones futuras.
Extrañaremos profundamente a Helen Holguin, pero su espíritu y sus contribuciones al movimiento laboral nunca serán olvidados. Descansa en paz, Helen. Tu lucha por la justicia y tu amor por tu familia de la unión permanecerán por siempre en nuestros corazones.